el caballero de plata
Texto dedicado ... al caballero de plata XD
Cogió la hoja con suavidad, temiendose lo que leería. La hoja olia a su perfume, fragancia del mar, Depende, Aroma a Mar. Una colonia muy conocida, pero para él, siempre que la llevaba ella, era diferente. Se sentó un momento y espero antes de leer… no sabía si estaba preparado… pero debia leer aquella maldita carta…
“Odio cuando no estás… cada momento que pasa sin que sepa de ti me duele… pero decidí dejarte ir, decidí que lo nuestro no era posible.
Siento que cada letra sangra de mi corazón, que mis manos escriben solas y que no las puedo parar. No sé como puedo tener vida aún, porque mi corazón está roto. Late como un extraño en mi pecho, y parece gritar con cada latido, pero permanezco muda, haciendole caso omiso a sus llamadas y gritos.
No pude retenerte, y ahora no podré conseguirte. Porque mi otra mitad del corazón tambien tiene dueño.
Cuando te conocí lloré casi por tus palabras, como bálsamo de agua fresca, como miel en mis amargos labios, asi fuiste para mi, la menta de un dia seco, la flor de un prado verde, el aire de la montaña que refresca el valle. Sensaciones que antes creí que solo una persona podría causarme… y eso… dolía.
Ahora todo pasó o ha de pasar, aun no sé que deseo. Y no sabes como estoy agradecida a las fuerzas de éste mundo. Te movieron hacia mi, cruzaron nuestros caminos, y tus sentimientos abriste para mi. Te hubiera abrazado si hubiese podido, acunar entre mis brazos y apretarte contra mi pecho, evitar que el dolor de la soledad entrara en ti e hiciera estragos por doquier. Pero no fui yo la que te salvó. Sino al revés.
Tus ánimos, tus palabras, tus desafios y hasta tus enfados mi caballero plateado, todos ellos me han dado conocimiento y me han dado valor para seguir adelante mi camino. Tu persona fue algo importante para que yo siguiera viviendo, y lo seguirá siendo. Porque aunque ahora solo queden las hermosas palabras de amigos inseparables, tu sigues en mi vida… y no quiero que te marches nunca de ella.
Con todo esto solo quiero agradecerte lo que has hecho por mi, lo que con tanto mimo me has dado. Quiero agradecerte los instantes en los que me has enseñado a vivir mas la realidad. Y solo tengo palabras para decirte que jamás te olvidaré. Y que siempre me tendrás aquí, pendiente de ti, esperando a que seas feliz, pues sé que no todo es perfecto pero la felicidad la encuentra uno en su interior.
Nos veremos pronto mi tierno caballero de armadura plateada.”
Cuando terminó de leer esto… el vampiro sonrió y miró su armario. Ahí estaban los vestidos que él le había regalado, solo faltaban las ropas de viaje. No podia evitar sentirse asi. Estaba dolido por la repentina marcha, pero a la vez era conscientes de las sabias palabras que la carta tenia.
A veces hay que dejar marchar lo que más se ama…
Miró la habitación, ahora tan vacía sin la presencia de la vampira, tan silenciosa y extraña. Se sentó en la cama y recordó las noches de pasión. Su corazón latía excitado y lleno de necesidades que ya no podría ofrecer a ninguna criatura.
Miró el cielo, la noche pronto pasaría, pero la luna aun seguia brillando. Se levantó y miró a su alredor, descubrió la cota de malla que él llevara el dia que la rescató de otro vampiro. Por aquellos dias él siempre iba con parte de su antigua armadura sencilla, unas hombreras plateadas y una cota de malla. Su espada siempre colgando de la cintura bien tallada y un casco con una pluma roja, la pluma de un marqués.
Aquel dia ella lo habia visto como un caballero ahora… se despediría ante aquel caballero Asi que cogio sus pertenencias y volvio a colocarselas sobre el traje blanco. Montó su caballo y tras encontrar el rastro del caballo de la vampira le dio alcance.
Ella sonrió y sin bajar de su caballo se acercó a él y le entregó una caja de madera.
-Sabia que vendrías- dijo ella besándolo.
Texto dedicado ... al caballero de plata XD
Cogió la hoja con suavidad, temiendose lo que leería. La hoja olia a su perfume, fragancia del mar, Depende, Aroma a Mar. Una colonia muy conocida, pero para él, siempre que la llevaba ella, era diferente. Se sentó un momento y espero antes de leer… no sabía si estaba preparado… pero debia leer aquella maldita carta…
“Odio cuando no estás… cada momento que pasa sin que sepa de ti me duele… pero decidí dejarte ir, decidí que lo nuestro no era posible.
Siento que cada letra sangra de mi corazón, que mis manos escriben solas y que no las puedo parar. No sé como puedo tener vida aún, porque mi corazón está roto. Late como un extraño en mi pecho, y parece gritar con cada latido, pero permanezco muda, haciendole caso omiso a sus llamadas y gritos.
No pude retenerte, y ahora no podré conseguirte. Porque mi otra mitad del corazón tambien tiene dueño.
Cuando te conocí lloré casi por tus palabras, como bálsamo de agua fresca, como miel en mis amargos labios, asi fuiste para mi, la menta de un dia seco, la flor de un prado verde, el aire de la montaña que refresca el valle. Sensaciones que antes creí que solo una persona podría causarme… y eso… dolía.
Ahora todo pasó o ha de pasar, aun no sé que deseo. Y no sabes como estoy agradecida a las fuerzas de éste mundo. Te movieron hacia mi, cruzaron nuestros caminos, y tus sentimientos abriste para mi. Te hubiera abrazado si hubiese podido, acunar entre mis brazos y apretarte contra mi pecho, evitar que el dolor de la soledad entrara en ti e hiciera estragos por doquier. Pero no fui yo la que te salvó. Sino al revés.
Tus ánimos, tus palabras, tus desafios y hasta tus enfados mi caballero plateado, todos ellos me han dado conocimiento y me han dado valor para seguir adelante mi camino. Tu persona fue algo importante para que yo siguiera viviendo, y lo seguirá siendo. Porque aunque ahora solo queden las hermosas palabras de amigos inseparables, tu sigues en mi vida… y no quiero que te marches nunca de ella.
Con todo esto solo quiero agradecerte lo que has hecho por mi, lo que con tanto mimo me has dado. Quiero agradecerte los instantes en los que me has enseñado a vivir mas la realidad. Y solo tengo palabras para decirte que jamás te olvidaré. Y que siempre me tendrás aquí, pendiente de ti, esperando a que seas feliz, pues sé que no todo es perfecto pero la felicidad la encuentra uno en su interior.
Nos veremos pronto mi tierno caballero de armadura plateada.”
Cuando terminó de leer esto… el vampiro sonrió y miró su armario. Ahí estaban los vestidos que él le había regalado, solo faltaban las ropas de viaje. No podia evitar sentirse asi. Estaba dolido por la repentina marcha, pero a la vez era conscientes de las sabias palabras que la carta tenia.
A veces hay que dejar marchar lo que más se ama…
Miró la habitación, ahora tan vacía sin la presencia de la vampira, tan silenciosa y extraña. Se sentó en la cama y recordó las noches de pasión. Su corazón latía excitado y lleno de necesidades que ya no podría ofrecer a ninguna criatura.
Miró el cielo, la noche pronto pasaría, pero la luna aun seguia brillando. Se levantó y miró a su alredor, descubrió la cota de malla que él llevara el dia que la rescató de otro vampiro. Por aquellos dias él siempre iba con parte de su antigua armadura sencilla, unas hombreras plateadas y una cota de malla. Su espada siempre colgando de la cintura bien tallada y un casco con una pluma roja, la pluma de un marqués.
Aquel dia ella lo habia visto como un caballero ahora… se despediría ante aquel caballero Asi que cogio sus pertenencias y volvio a colocarselas sobre el traje blanco. Montó su caballo y tras encontrar el rastro del caballo de la vampira le dio alcance.
Ella sonrió y sin bajar de su caballo se acercó a él y le entregó una caja de madera.
-Sabia que vendrías- dijo ella besándolo.
-No puedes irte… hemos pasado mucho tiempo juntos, no puedes ir en busca de un fantasma.
-Es lo que debo hacer amor. Es lo que mi corazón pide. Te tengo a ti por siempre… mantente con vida hasta el dia que yo regrese por lo menos mi amor. Volveré a por ti y a por eso. - Le dio el más dulce de los besos que a pesar del sabor a miel traía consigo el amargor del adiós. –Gracias mi caballero… aquella vez te vi como un apuesto caballero en su armadura de plata, me llevo ese recuerdo conmigo hoy.
-No te dejaré ir...- La cogio del brazo y casi la arrancó de la silla.
-No te dejaré ir...- La cogio del brazo y casi la arrancó de la silla.
-A veces el amor se demuestra dejando marchar a la persona amada…
El la soltó de repente… reconociendo aquellas palabras como suyas. Suspiró y se mantuvo a la espera. La noche ya llegaba a su fin casi. Ella tiró de las riendas y el caballo salió corriendo. Asi se perdió de su vista y asi salio de su vida.
Al llegar a la mansión abrió la caja. Dentro encontró el anillo que había mando hacer para ella, un anillo sencillo pero hermoso, y un frasquito con un liquido rojo. Había una cartita dentro.
“Duele separarse de lo que amas… mis lagrimas son la muestra de ello… conservalas para que recuerdes que te amo. Cuando vuelva volveré a llevar ese anillo.”
Asi como el amor llega tambien se va. No somos conscientes de que dia a dia hay que cuidarlo y limpiarlo, ofrecer nuestros más hermosos pensamientos y deseos y nuestros mas profundos sentimientos.
Pero no somos perfectos y quizas la busqueda nos lleva a quien tanto esperamos pero no estamos seguros de esa decisión. Y seguiremos buscando hasta que la desesperación nos devore y la necesidad de un abrazo puro nos corroa por dentro. Es entonces cuando notamos que una decisión puede ser errónea o correcta.
Sea como sea… amar significa comprender a esa persona amada, incluso en la hora de dejarla ir.
El la soltó de repente… reconociendo aquellas palabras como suyas. Suspiró y se mantuvo a la espera. La noche ya llegaba a su fin casi. Ella tiró de las riendas y el caballo salió corriendo. Asi se perdió de su vista y asi salio de su vida.
Al llegar a la mansión abrió la caja. Dentro encontró el anillo que había mando hacer para ella, un anillo sencillo pero hermoso, y un frasquito con un liquido rojo. Había una cartita dentro.
“Duele separarse de lo que amas… mis lagrimas son la muestra de ello… conservalas para que recuerdes que te amo. Cuando vuelva volveré a llevar ese anillo.”
Asi como el amor llega tambien se va. No somos conscientes de que dia a dia hay que cuidarlo y limpiarlo, ofrecer nuestros más hermosos pensamientos y deseos y nuestros mas profundos sentimientos.
Pero no somos perfectos y quizas la busqueda nos lleva a quien tanto esperamos pero no estamos seguros de esa decisión. Y seguiremos buscando hasta que la desesperación nos devore y la necesidad de un abrazo puro nos corroa por dentro. Es entonces cuando notamos que una decisión puede ser errónea o correcta.
Sea como sea… amar significa comprender a esa persona amada, incluso en la hora de dejarla ir.
